En el nuevo capítulo de Jóvenes de hoy hablaremos sobre las revistas de nuestra adolescencia e infancia, aquellas que no podían faltar a inicios de los 2000.
Hablaremos para empezar de los muchos tipos que había. Las revistas Nancy, que centraban su contenido en la muñeca con su mismo nombre. Las revistas Top Model creada tras el fenómeno de la línea de papelería que conquistaba a las niñas y niños más creativos y con afán hacia la moda. Siguiendo con las revistas de un target tan concreto, teníamos la revista oficial de la serie argentina Violetta, en la cual te contaban todo sobre sus actores y sobre la serie en general, solo para sus fans más fieles.
En cuanto a las revistas que abarcaban un sector de contenido más amplio y maduro, teníamos la revista Como Tú, que surgió en 2008; la revista oficial de Disney Channel, del canal de televisión; y la revista Bravo, que se centraba más en adolescentes y se atrevía con un contenido más rompedor.
Luego seguiremos hablando de las distintas secciones que todas estas revistas compartían. En estas revistas no podía faltar alguna manualidad creativa con sus instrucciones paso a paso, como también siempre había sorteos o concursos entre los lectores. Aunque sus secciones estrella eran sin duda las entrevistas que hacían a los distintos famosos que estuvieran en auge en su momento y las tendencias que estos seguían. No podemos olvidarnos de los test que había sobre variedad de contenidos y los horóscopos que nos contaban cómo sería nuestra semana. Pero, siendo sinceros, su plato estrella eran los regalos que venían con ellas, lo único por lo que muchos se las compraban.
Este guiño a las revistas con un toque nostálgico nos hará recordar una época ya pasada, porque muchas de estas revistas ya ni existen. Pero nunca viene mal cerrar los ojos y recordar el bonito pasado. Y tú, ¿te animas a recordar con nosotras?
El programa de esta semana viene cargado de noticias impactantes y debates apasionantes. Como siempre, os traemos lo último en música y espectáculos, además de una tertulia que promete dar mucho de qué hablar.
Para empezar, Ana Santamaría nos traerá una noticia que ha generado gran preocupación entre los fans: el declive del estado de salud de Justin Bieber. En los últimos días, se ha especulado que el cantante podría estar atravesando problemas con las drogas, lo que ha encendido las alarmas en la industria musical. Analizaremos la información disponible y lo que se sabe hasta ahora.
Por otro lado, Marta Pau nos hablará de uno de los festivales más esperados del año: Riverland. Con un cartel impresionante y una ubicación envidiable, este festival se ha convertido en un referente dentro de la escena musical. Comentaremos las novedades de su próxima edición y lo que hace de este evento una experiencia única.
Clara Luque nos contará todos los detalles sobre el regreso de Claudio Montana y el esperado fin de gira de Carolina Durante. Dos noticias que han causado gran revuelo entre los seguidores de la música indie y que marcan el cierre y el inicio de nuevas etapas en sus carreras.
Además, tendremos la tertulia de la semana, donde hablaremos sobre las divas del pop. Desde Madonna, la reina indiscutible, hasta las estrellas actuales que han seguido sus pasos, repasaremos su impacto en la música, sus momentos más icónicos y su legado en la industria.
Un programa lleno de información, debate y mucha música. ¡No os lo podéis perder
“No, no es amor. Lo que tú sientes se llama obsesión”. Este temazo del grupo de bachata Aventura podría ser un perfecto resumen de lo que sentimos muchos de los jugadores y jugadoras con nuestros videojuegos favoritos. Aunque a lo largo de la vida se pueden jugar a muchos videojuegos, hay solo unos pocos con los que verdaderamente uno se puede obsesionar. Este episodio va dedicado a todas esas horas excesivas que hemos dedicado frente a la pantalla con algunos míticos juegos.
Jaime abrirá el episodio de hoy de Hablamos de Videojuegos hablando de Brawl Stars. Este videojuego con partidas de menos de 3 minutos de duración nació en el año 2017. Sin duda, es el videojuego más moderno de los que comentaremos hoy. Además, Jaime define este juego como sencillo de jugar, pero con un complejo envoltorio.
Por su parte, Daniel sacará su lado más Fife con su obsesión por la Liga Fantasy. Este juego de móvil ha evolucionado muchísimo desde sus inicios en los 90, pero siempre ha tenido en cuenta una cosa: el rendimiento de tus jugadores favoritos dentro del terreno de juego. No obstante, este videojuego no es solo un mero reflejo de los resultados deportivos. El Fantasy también cuenta con una vertiente más asociada a los memes y a los piques entre amigos.
Dámaso nos desvela que su obsesión por Pokemon es algo que siente desde bien pequeño. Hablaremos sobre las míticas músicas de Pokemon (incluso las japonesas) y nos detendremos a comentar aspectos característicos del juego como el Team Rocket o el merchandising.
Finalmente, Etienne cerrará el programa hablando de Payday 2. Si abríamos el programa con un shooter, lo cerramos con otro videojuego de disparos que cuenta con más de 49 extensiones y un protagonista con una curiosa máscara.
Si Terapia Deportiva tuviera un estadio y una afición, o si fuera un club de fútbol, nunca sería el Rayo. Tampoco ningún otro: los cuatro papanatas que integran este programa apenas saben utilizar una cafetera de cápsulas. Nadie nunca podría ser el Rayo, en realidad. Ni el Madrid, ni el Barça, ni el Atleti, ni el Al-Nassr, ni Las Palmas, ni el Mirandés, ni Mbappé, ni Salah, ni Musiala, ni James, ni Jesé, ni Catar, ni Arabia Saudí, ni Estados Unidos (bueno, cuidado). Vallecas es de los pocos resquicios que nos quedan de un fútbol que se nos va de las manos, que nos engulle y que nos hace creer que no, que sigue existiendo por y para nosotros. Paco Jémez, Andoni Iraola o Íñigo Pérez, da igual: ver a Andrei Rațiu proteger un balón mientras mira y habla con la linier, o a los jugadores calentando a menos de un metro de la grada, o a Alberto Bueno resubiendo historias de Instagram repanchingado en el área de television, o tararear The Final Countdown después de celebrar un gol como si hubiese sido tuyo, todo, todo lo que a uno se le pueda ocurrir y que suceda o pueda suceder en el Estadio de Vallecas, todo, trasciende: es la casa del infrarrealismo. Ahora sí, si Roberto Bolaño o Mario Santiago tuvieran un estadio y una afición, o si fueran un club de fútbol, sin duda serían el Rayo Vallecano de Madrid (o de México, o de Chile, o de donde sea).